Como cada año, el 25 de febrero celebramos el Día Internacional del Implante Coclear. Aunque la función que realiza un implante coclear (IC) es conocida por la mayoría de la población, es interesante que demos a conocer las ventajas de este dispositivo así como la nueva tecnología que está siendo usada en las personas que son candidatas a ser portadores de un IC.
La audición nos mantiene conectados con nuestro entorno, y cuando el sentido del oído nos falla, una parte de la conexión con los demás se ve afectada; así, con el uso de IC no solo se ha solucionado un problema de audición, sino de relación de las personas con su entorno, tanto social como laboral, así como de localización de los sonidos en el espacio; de comunicación, de desarrollo del lenguaje, de aislamiento, y de desarrollo intelectual y cognitivo, ya que la gran mayoría de la información que necesitamos para desarrollar todas esta actividades nos llegan a través del oído.
El implante coclear es un dispositivo electrónico que se introduce en el interior de la cóclea, estimula el nervio auditivo y hace que los pacientes con pérdida de audición severa o profunda, por un daño coclear severo, vuelvan a oír.
Durante los últimos años están apareciendo nuevas tecnologías para poder usar audífonos compatibles con IC. De esta manera, se aprovechan al máximo las posibilidades auditivas de la persona utilizando en un oído la tecnología del IC y en el otro oído un audífono aprovechando los “restos” auditivos. Ambos dispositivos funcionan en conjunto con funciones y controles automáticos compartidos para ofrecer la mejor calidad sonora y facilidad de uso.
También ofrecen una nueva tecnología que permiten conectarlos a cualquier dispositivo (teléfonos, tablets, televisión…); hacer llamadas telefónicas con manos libres, transmitir música u otro tipo de audio de manera directa y conseguir una mejor calidad sonora cuando se ve la televisión.
Ana Rubio Griñán
Audióloga y Logopeda de Audioalba
